Estaba viendo una de las mis series favoritas, el Super Agente 86, cuando en una de las tantas situaciones graciosas Max bebe Champagne adicionado con suero de la verdad, que el mismo coloca pero que debería tocarle a la bella dama a quien debe interrogar.
A continuación mantiene una graciosísima conversación telefónica con el Jefe de Control, donde afectado por el brebaje suelta toda su ironía y descaro en su contra.
Esta pequeña introducción es para tratar de llegar a lo siguiente:
¿Qué pasaría en caso de que nosotros fueramos presa de semejante situación?
¿Qué clase de barbaridades diríamos?
Hasta que punto "debemos" ser complacientes y hasta un tanto hipócritas con tal de mantenernos en ciertos círculos, ya sea en una reunión familiar o en el trabajo cuando alguien nos responde de manera inadecuada y nos hacen sentir incómodos...
Por mi parte debo ser sincero, no tengo la capacidad de ser frontal, en cambio trato de dejar pasar estas situaciones incómodas. Pero claro, esto me fuerza a ser "hipócrita", hacerle creer a los demás que está todo bien, tal vez esté mal pero no hay mala intención en ello.
Tengo la sensación de que hay mucha gente que hace esto y me pregunto si realmente está mal, no critíco a quienes pueden ser más frontales, me parece que el "sistema" nos lleva a esto.
Que más placentero podría ser decirle en la cara (de buena manera, o no) al Gerente: "Está equivocado", sin temor a que a la mañana siguiente estemos hojeando los clasificados.
¿Acaso es culpa del capitalismo? ¿O somos nosotros los que aprovechamos el amparo de una sonrisa falsa para evitar el choque?
Son cosas que me dejan pensando y eso es bueno, no? (?)
